Errachidia con Initiative association

Autor/a

Idoia Ugalde

País

España

Provincia

Araba/Álava

Es una experiencia de Idoia Ugalde

Sólo tengo buenos recuerdos de nuestro voluntariado en Errachidia con Initiative association.

Tenía muchas ganas de realizar un voluntariado en el extranjero y después de buscar y buscar, me llamaron la atención los proyectos de esta asociación de Marruecos. Me puse en contacto con ellos y no dudé en apuntarme. Desde el primer día me resolvieron todas las dudas, me pusieron en relación con voluntarios de otros veranos, etc. Todo fue fácil. Desde el primer momento me sentí segura y confiada en el proyecto que se presentaba.

Y qué decir de la experiencia… Nada más comenzar nuestra aventura en Errachidia nos fuimos todos a casa de un coordinador a cenar. Sin apenas conocernos, nos invitaron a todos y nos “metimos” de lleno en la increíble cultura marroquí. Y de esta manera tan especial comenzó una experiencia inolvidable en aquel lugar.

Todas las mañanas el grupo de voluntarios se separaba. Algunos enseñaron idiomas (francés, inglés y español); otros llevamos a cabo actividades con los más pequeños y otros, se dedicaron a pintar el colegio. Los niños desde el comienzo nos mostraron su cariño y simpatía. A pesar de no poder mantener una conversación con los más pequeños, conectamos muy bien de otras maneras. Allí pude comprobar que el idioma no lo es todo, cuando de verdad hay ganas de ayudar y entenderse.

Después de comer los planes solían variar: ir a la piscina, clases de árabe, conocer alrededores de Errachidia, ir al zoco, ir a una piscina natural, a otro colegio a pintar… Por si fuera poco, los coordinadores prepararon diferentes actividades para los fines de semana. En una ocasión visitamos el desierto de Merzouga y otro fin de semana el valle del Dades y del Todra. Lugares inolvidables no sólo por la belleza que muestra Marruecos, sino por el buen ambiente entre voluntarios y coordinadores. Los coordinadores nos mostraban lo mejor de su tierra y eso facilitó para que nuestro recuerdo sea el mejor.

Fueron unos días muy intensos y entrañables. Hubo muchas cosas que me maravillaron pero si tendría que destacar algo sería la belleza natural de Marruecos y la hospitalidad de la gente. Por último, y no por ello menos importante, me gustaría señalar las veladas después de cenar. Noches de música, risas, historias, opiniones… El cansancio no se notaba y disfrutábamos de esos momentos de tranquilidad a la luz de las estrellas.

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