Personas con capacidad de trabajo, que quieran pasar unos días diferentes y estén dispuestos a dar lo mejor de ellos mismos.

En AMEB la persona voluntaria presta los apoyos necesarios a las personas, los cuales están dirigidos principalmente a hacer accesible la oferta comunitaria, es decir las oportunidades de ocio a las que todos accedemos habitualmente. Todas las personas necesitamos apoyos para desarrollarnos y vivir. Cuando vamos de vacaciones a una ciudad que no conocemos los planos nos ayudan a hacer turismo y orientarnos por la ciudad, en nuestra vida diaria necesitamos el apoyo de las personas cercanas, de los recursos de la comunidad y de los profesionales que trabajan en ellos (médicos, profesores.). Las personas con discapacidad necesitan los mismos apoyos, pero con mayor intensidad y frecuencia. En AMEB las personas voluntarias se encargan de prestarlos, siempre teniendo en cuenta que:

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  El apoyo no es un lujo sino una necesidad y un derecho para desenvolverse con el entorno


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  Cada persona es diferente y debe recibir los apoyos que necesite en un momento y lugar concreto