Voluntaria en el Orfanato de Likoni (Mombasa, Kenia)
- Autor/a
- Susana Gómez
Es una experiencia de
Susana Gómez
Miles de veces hemos visto el telediario y miles de veces África era el tema principal con sus sequías, sus hambrunas, epidemias, miseria y sueños rotos. Pero, cuando llegué a Kenia por vez primera, quedé profundamente impresionada. La realidad a veces supera la ficción. Cuando vi Nairobi, me quedé sin habla. Y dos días después, cuando pisé el Orfanato en Mombasa, todavía estaba sin habla.
En la casa no había agua potable, la comida era escasa y repetitiva, los zapatos y la ropa eran viejos, rasgados y compartidos. Todos viven en una barriada donde cientos de niños juegan medio desnudos en la calle.
Cada día cruzaba sus caminos y podía percibirles mirándonos fijamente como si fuéramos una especie de semi-dioses. Solían dejar todo aquello que estaban haciendo y dirigirse a nosotros diciendo: Hey, Muzungu (blanco), cómo estás? Con una sola mirada se podía entender cuánto trabajo había por hacer allí!
Después de casi dos meses conviviendo con ellos, todos se convirtieron en nuestros amigos y me sentía orgullosa de compartir techo con estas gentes de gran corazón. Durante este tiempo, conseguimos zapatos, uniformes escolares, mochilas y regalos de navidad para ellos.
Fueron muy agradecidos pero no podían entender que la que tenía que dar las gracias era yo por todo lo que me habían dado. Ellos me hicieron dar cuenta de que hay algo más en la vida que luchar por un trabajo mejor, una casa mejor, o un coche mejor. Me enseñaron que hay algo mucho más grande por lo que luchar: LOS SERES HUMANOS QUE NOS RODEAN.
Hace tres meses que volví y, desde entonces, he trabajado en 2 escuelas en Barcelona, estoy acabando una licenciatura, pero mis días se quedaron cortos de horas por pasar mucho tiempo haciendo proyectos para el orfanato.
Desde entonces, siento que un nuevo motor conduce mi vida y no me arrepiento ni uno solo de los segundos que he pasado ayudando a estos niños.
Post reproducido por consentimiento de la autora y aparecido originalmente en http://orfanatolikoni.blogspot.com
¡Muchas gracias Susana!
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