Blog / Noticias


Teletrabajo: consejos para hacerlo bien

18/03/2020

Muchas organizaciones y empresas llevan tiempo adoptando medidas de flexibilidad como el teletrabajo algún día a la semana, para ayudar a sus empleados/as a conciliar la vida laboral y profesional. Con la crisis generada por el COVID-19 han tenido que adaptarse a teletrabajar entidades y empresas que hasta ahora no lo habían hecho. ¿Cómo adaptarse al teletrabajo? ¡Sigue leyendo!


 


El teletrabajo es una medida de flexibilidad laboral muy interesante y beneficiosa, bien implantada puede suponer incluso mayor productividad y mejor rendimiento general. Por supuesto, no todas las profesiones pueden acogerse al teletrabajo, pero hay un porcentaje muy elevado de puestos de trabajo que no requieren de presencia física en una oficina y se pueden realizar a distancia.

La crisis del coronavirus que estamos viviendo ha obligado a muchas organizaciones y empresas a implantar el teletrabajo, algunas sin experiencia previa. En estos casos, tanto empleados/as como organización o empresa, tienen que saber adaptarse para poder continuar sacando adelante los proyectos y tareas en marcha.

Por un lado, las organizaciones o empresas tienen que coordinar la parte organizativa del equipo. Una de las claves es que cada persona del equipo sepa nítidamente cuáles son sus tareas, qué tiene que hacer en cada momento. En realidad, lo mismo que presencialmente en la oficina, pero ahora organizándose en casa y sabiendo cuándo y cómo comunicarse con los compañeros/as que sea necesario en cada momento.

Además, para que todo siga funcionando con normalidad como funcionaría en la oficina, las entidades o empresas que implanten el teletrabajo tienen que asegurarse de que todas las personas tienen los recursos necesarios para teletrabajar y que pueden mantener una comunicación constante para alcarar dudas o procesos cuando sea necesario (durante la jornada laboral) en remoto con sus empleados/as y que estos pueden mantener también comunicación entre ellos/as, para ello existen multitud de herramientas que lo permiten (correo, Skype...).

Consejos para teletrabajar con eficiacia

Teletrabajar requiere saber organizarse, responsabilidad y compromiso. También poder estar siempre conectado/a y disponible (durante tu jornada laboral) para atender una llamada, videollamada, etc. de jefes/as y/o compañeros/as.

- Elegir el espacio: si entra dentro de nuestras posibilidades, es recomendable que se destine un lugar de la casa como espacio de trabajo y que sea siempre el mismo. Cada persona se acaba organizando y sintiendo cómoda de diferente manera, pero está bien separar lo que es el espacio de trabajo del resto de espacios.

El espacio que elijamos tiene que ser lo más confortable posible, con una mesa de trabajo (mejor que estar en el sofá con el portátil en las rodillas), una silla cómoda y con unas condiciones de ventilación y de luz buenas.

Y, lógicamente, en ese espacio tienes que tener asegurada una buena conexión a Internet.

- Vestirse: como decíamos antes, no todo el mundo funciona de la misma manera y lo que les puede servir a unos, puede no servir en absoluto a otros. Pero trabajar en casa en requiere también cambiar el chip a nivel mental y para llegar a tener la sensación real de que estás trabajando y no estás en casa haciendo tus cosas, se recomienda no trabajar en pijama, por ejemplo. Vestirse como si fueses al trabajo es una buena opción. Si normalmente tu trabajo requiere ir vestido con traje o muy elegante, tal vez no sea necesario que te lo pongas en casa, pero tampoco te quedes en pijama y bata. A nivel emocional este tipo de cosas se notan.

- Organización: como decíamos antes, trabajar en casa requiere un plus de organización respecto al que puedas tener en la oficina. Si manejas papeles, no los tengas tirados por la mesa, organízalos bien, fija tus tareas del día cada mañana y ve haciéndolas como si estuvieras en la oficina.

Una ventaja del teletrabajo es que, cumpliendo con tu horario laboral diario y haciendo tu trabajo, puedes organizar tu tiempo de una manera más flexible. Aprovéchalo para hacer las pausas que necesites como mejor veas, pero ojo, mantente fiel a tu horario y cuando termines, desconecta. Puede suceder que alarguemos las jornadas sin darnos cuenta ya que estás en casa. Si esto ocurre se debe a una mala organización del tiempo o a algún caso puntual algún día, pero no se puede convertir en una constante. Tienes que aprender a separar cuando acaba tu jornada laboral y cuando comienza tu tiempo de ocio.

- Evitar distracciones: trabajar en casa tiene muchas ventajas como estamos viendo pero también es más fácil sucumbir a diversas distracciones, ya que no hay nadie “vigilándote” o pendiente de ti como en la oficina. Tenemos que ser serios/as y responsables como decíamos al comienzo y no dejarnos llevar por la tentación. Establecer en nuestros horarios tiempos de descanso donde poder mirar el móvil, buscar algo en Internet, etc., como harías en la oficina.

- Hablar con los/as compañeros/as: más allá de las posibles reuniones que podáis tener en remoto para resolver o avanzar en algún tema laboral, está bien que dediques algún momento de la jornada a hablar de manera más distendida con los/as compañeros/as, para seguir fomentando el espíritu de equipo y para no aislarse.

El teletrabajo “forzado” al que ha abocado la crisis del coronavirus nos enseñará nuevas maneras de trabajar y tal vez crezcamos y evolucionemos hacia modelos laborales más flexibles y cómodos para todos y todas.


Ver ofertas de empleo


 

Hacesfalta.org Fundación Hazloposible | secciones: Empleo en el sector social

 

Este post no admite comentarios


PUBLICIDAD

Con el apoyo de: 

 

 

Visita hacesfalta.org empleo